La medida de CiU establece que el permiso será ampliable en dos días más en caso de parto múltiple por cada hijo o hija a partir del segundo, e insta al Gobierno a llevar cabo campañas de sensibilización con la finalidad de incentivar la distribución a partes iguales de las responsabilidades familiares entre el padre y la madre.
Pigem denunció que los empleadores "castigan laboral y salarialmente a la mujer embarazada", y pidió al Gobierno que promueva entre las empresas una mayor flexibilidad horaria y reconozca a las empresas familiarmente responsables que faciliten la conciliación.
Por su parte, la diputada socialista Soledad Cabezón destacó la labor del Gobierno realizada para favorecer la igualdad ente hombres y mujeres y avisó que en España todavía no está generalizado el uso del padres de todos los derechos que le son reconocidos por ley.
Mientras, el diputado Santiago Cervera dijo el PP respalda esta medida porque "coincide con las propuestas" de su grupo y afirmó que la conciliación laboral y familiar una de las reformas "más necesarias" del sistema de trabajo en España.
Además, aseguró que la igualdad "se consigue con medidas efectivas y no con ministerios contragramaticales", al tiempo que indicó que ya hay muchas empresas que están implantando medidas para favorecer la conciliación.
A su vez, el diputado Emilio Olabarría afirmó que el PNV "apoya con entusiasmo" la iniciativa de CiU y agregó que "la corresponsabilización de las tareas padres es una cuestión de justicia social". "Parece que en esta legislatura las políticas natalistas se están dejando de ver como políticas conservadores", añadió.
Por último, el portavoz de ERC, Joan Tardà, apoyó esta iniciativa porque 13 días "son insuficientes para alcanzar el reparto equitativo" de los padres en las tareas domésticas y de atención a los hijos.
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